“Y, si te quedas conmigo jugando en la trastienda, como no
tienes maquila con la que negociar, te doy mil pesetas.”
“¡Já ,já, jugar dice usted, señor molinero. Querrá decir
HIJAR,já,já!.”
“¡Sí, sí ,eso de jugar a tener hijos, já, já!”
“Eso es muy sagrado, pero a lo mejor llegamos a un acuerdo”
“¿Cuándo?”
“Mañana vuelvo a visitarle: estamos de acampada en EL LLANO DE LAMUÑO.Y le diré la solución.”
Al oír los padres de la gitanilla la proposición del
molinero, empezaron a preparar cuchillos, garrotes, escopetas, en fin, un
castigo ejemplar.
“¡Esperad, esperad, tengo una idea mejor para castigar al
payo del molinero!”,dijo, de pronto ,el
patriarca del campamento.
Bien aleccionada, subió la gitanilla al molino, y rondó
hasta que pudo quedarse a solas con el excitado GUNDÍN.
No hay comentarios:
Publicar un comentario