LAS ALAMBRADAS

EL MUNICIPIO donde pasé tres meses confinado  tiene forma rectangular:25 kilómetros de ancho por 45 de largo.

MI LUGAR DE RETIRO se encuentra al NORDESTE, como a cuatro kilómetros en línea recta del límite con LA PROVINCIA en la que estoy censado.LA CAPITAL del MUNICIPIO, de unos sesenta mil habitantes, se ubica en el SUDESTE del RECTÁNGULO MUNICIPAL.

Veo desde un altozano cómo los vehículos, en terrenos de MI PROVINCIA de ORIGEN ,se desplazan por LA AUTOVÍA y por LA CARRETERA NACIONAL. El camino más corto para ir a LA CAPITAL  es justo por AUTOVÍA o CARRETERA NACIONAL, a las que se accede por UNA CARRETERA LOCAL de cinco kilómetros, los tres primeros de LA PROVINCIA DE CONFINAMIENTO y los otros dos de MI PROVINCIA  DE ORIGEN. No hay, en principio, objeción por parte de LA GUARDIA CIVIL a que se utilice esa ruta.

Pero de golpe y porrazo la  cosa cambia.!No se puede tocar ni un solo metro de MI PROVINCIA DE ORIGEN!.

UNA JOVEN GANADERA  cuyo PREDIO tiene salida a ambas provincias, aunque LA CASA se ubica en LA DE MI CONFINAMIENTO, es sancionada por acceder a LA AUTOVÍA por la ruta de siempre:

-¡Necesito ir de urgencia a LA FARMACIA VETERINARIA DE ZONA!.

¡Pues vaya por CARRETERAS  de SU PROVINCIA!.EL JEFE DE PATRULLA se muestra firme.

MULTA AL CANTO para LA JOVEN, que ante la premura del tiempo prefirió quedarse sin 601 euros antes que recorrer casi noventa kilómetros por CARRETERAS LOCALES .Por AUTOVÍA son 38 kilómetros.

EN MIS PASEOS veía LAS ALAMBRADAS de LAS DOS FINCAS que nos separaban de LA SALVACIÓN:!UN VIAJE DE IDA Y VUELTA por RAZONES MÉDICAS a NUESTRA CIUDAD DE ORIGEN!.Pero no nos atrevimos, no tanto por la posible sanción cuanto por la imposibilidad de volver al CONFINAMIENTO.

Es justo en esos días cuando veo en LA TELE una película alemana de TERROR e INTRIGA, en la que UNA JOVEN MAESTRA RURAL sufre lo suyo al alojarse en UNA CASITA que hasta finales de 1989 había sido ADUANA FRONTERIZA.LAS ALAMBRADAS, más o menos como las de cualquier finca, eran la única separación entre LAS DOS ALEMANIAS. Con suerte, muchos CAMPESINOS cambiaban del MUNDO SOVIÉTICO al OCCIDENTAL, con sólo saltar  LA CERCA .Pero debían de encomendarse a DIOS pidiéndole UNA DOBLE AYUDA:

-Que EL JEFE DE TURNO en LA ADUANA fuese EL BUENO y no EL MALO.

-Que no apareciesen POLICÍAS POLÍTICOS apoyados por MATONES SOVIÉTICOS y del ESTE, dispuestos a ametrallar  a través de LAS ALAMBRADAS a LOS FUGITIVOS, aunque ya llevasen muchos metros en TERRITORIO de LA REPÚBLICA FEDERAL.

Entre escombros y ruinas, LOS ESPÍRITUS recordaban que EL JEFE MALO había ASESINADO al BUENO por ser permisivo con los que querían huir .ESOS ESPÍRITUS eran los que asustaban a LA MAESTRA, hasta que se llega al CONSABIDO FINAL FELIZ.

A mí la dichosa película me pareció servir para la situación que vivíamos:!todo dependía de UNA SIMPLE ALAMBRADA!.

-¡Si queréis  marchar a VUESTRA PROVINCIA, que ya permite LA MOVILIDAD, yo puedo hablar con mi jefe para que os ayude!.EL GUARDA DE LA GRAN FINCA situada justo al lado de las vías del tren que ejercen de frontera, se mostró inusualmente amable.

¿Y cómo puede ayudarnos?

-Muy fácil, que os deje pasar por LA ANTIGUA TROCHA, que se bifurca en dos: UN RAMAL para CADA PROVINCIA.!Podéis salir por VUESTRA PROVINCIA y entrar por LA NUESTRA!.!Y al ser ZONA RURAL no va a haber controles!.

No nos pareció correcto aceptar su oferta, que agradecimos. Porque el hombre ignoraba lo que iba a suceder:!controles hasta en LAS TROCHAS!.

Imbuido del TERROR de LA PELÍCULA ALEMANA, sumé a LOS MIEDOS A LAS ALAMBRADAS ,la negativa a cruzar EL PASO A NIVEL SIN BARRERAS, en el que hace cinco años un tren regional chocó con un camión, y hubo, aparte varios heridos, dos muertos: el chófer del camión y una joven estudiante de veinte años.

Y yo me pregunto:¿por qué hace treinta años ya había sensores para descubrir posibles  fugitivos en torno a LAS ALAMBRADAS y en 2020 no hay algún sistema para advertir a conductores y caminantes que un tren va a pasar antes de tres minutos?.

¡DIOS quiera que no hayamos de repetir similares situaciones!.